
La librería desde adentro: Olavide | Bar de Libros

Raquel Garzón, librera en Olavide | Bar de Libros: «Los clubes de lectura están teniendo un atractivo especial para la gente. Generalmente la lectura es un placer solitario y lo que estamos notando es que la gente quiere poner en común lo que los libros le despiertan.»
Después de una pandemia y en un momento en el que el comercio local agoniza, todavía continúa la ilusión por abrir una librería de barrio y crear comunidad en torno a la lectura. Esta era una de las motivaciones de Raquel Garzón y Daniel Ulanovsky cuando decidieron, en el verano de 2022, darle vida a un bar antiguo y abrir una casa de libros. Así nació Olavide | Bar de libros y en Publishnews hemos querido saber un poco más sobre esta librería madrileña.
Olavide | Bar de Libros nació hace muy poquito. En un tiempo de crisis, ¿cómo se toma impulso para fundar una librería de barrio?
Abrimos en pleno verano, el 18 de junio. Eso ya parecía una locura porque la gente que puede huye de Madrid y la pregunta interna era: «¿Vendrá alguien?». Pero el impulso del que hablas lo traía el sueño mismo: la idea de hacer algo que nos permitiera seguir viviendo entre libros (Daniel Ulanovsky, mi marido, y yo provenimos del periodismo cultural y de opinión y somos, ante todo, lectores). Nos lanzamos y tuvimos suerte. La zona de la Plaza de Olavide tiene vida propia, un microcosmos que nos enamoró desde que encontramos la esquina, un antiguo bar, en la que situamos la librería. Creo que si el proyecto te entusiasma va tirando de ti y te ayuda a vencer los obstáculos que puedan surgir. No somos temerarios; los números hay que hacerlos y hay que ser prudentes, claro; pero el barrio nos ha acompañado y estamos muy contentos.

Foto: Facundo Penchervsky
Decís que creéis en el hambre de leer, en la sed de escribir y en el arte de la conversación. Teniendo en cuenta los nuevos hábitos de consumo y la convivencia diaria con la tecnología. ¿Cómo explicáis esto?
Siempre quisimos que Olavide fuera un punto de encuentro y no un lugar de paso; convertirnos en librería de cercanía para una comunidad de lectores, con todo lo que eso supone. Nos esmeramos en proponer un sitio en el que puedes elegir el próximo libro que vas a leer con el consejo de libreros que comparten esa misma pasión, pero también tomar una copa, encontrarte con amigos, asistir a una presentación o a una mesa redonda, conversar sobre una película o esa serie que viste de una sentada.
Nada de eso está reñido con el uso y el trabajo cotidiano que todos hacemos empleando la tecnología: a cierta hora, si puedes, paras. Te bajas de la línea de producción y eliges otro ritmo y otras actividades. Y sentimos que Olavide es un buen lugar para eso. El hecho de contar con una pequeña cafetería es un atractivo adicional para quienes nos visitan porque invita a pasar un rato agradable sin prisas, conversando, leyendo, escribiendo. Algunos vecinos han venido incluso a jugar al ajedrez o a dibujar, mientras disfrutan de una café con un bizcocho artesanal. Todas estas ideas se unen en las frases que citas, como parte de un credo laico, que estampamos en nuestra página web: Creemos en el hambre de leer, en la sed de escribir y en el arte de la conversación. La literatura es nuestra pasión y nuestro regocijo. Bienvenido lector, siéntete en casa.
En vuestra librería dais espacio a talleres y actividades que van más allá de la venta de un libro. ¿Hay mucha participación?
La gente quiere participar y agradece las iniciativas de calidad. La participación varía según la actividad. Los cuentacuentos para niños que hacemos los sábados (uno al mes, por lo menos), a cargo de la actriz María Carrera han sido muy bien recibidos por las familias jóvenes del barrio. Ofrecemos habitualmente muestras de fotografía o dibujo rotativas que son visitadas, sobre todo los fines de semana, cuando hay más tiempo libre. Facundo Pechervsky, Álvaro Guijarro y La Galería Incompleta ya han colgado sus trabajos en nuestras paredes. Hemos tenido mesas redondas (Patricio Pron, Juan Cruz, Antonio José Ponte), firmas de libros (Andrea Abreu), presentaciones de novedades editoriales (Berta Ares Yáñez, Eduardo Berti, Federico Vicco), lectura de poemas (Ada Salas), charlas (Margaryta Yakovenko), cursos y talleres.
Daniel Gascón abrió el juego del área formativa con un taller sobre Literatura y Humor, marcando un estilo: los cursos que proponemos se caracterizan por ser realizados por periodistas y escritores de primera línea y dirigidos a grupos pequeños, de no más de 15 personas.

Foto: Facundo Penchervsky
¿Estamos en un momento de boom de los club de lectura?
Los clubes de lectura están teniendo un atractivo especial para la gente. Generalmente la lectura es un placer solitario y lo que estamos notando es que la gente quiere poner en común lo que los libros le despiertan. Leer con otros o intercambiar impresiones después de las lecturas aporta un plus que se disfruta mucho. Desde septiembre tenemos un club de lectura coordinado por Eva Cruz, que culmina su primera etapa -dedicada a leer novelas sobre la amistad entre mujeres- antes de Navidad y que retornará en febrero. Pero por esa demanda que percibimos, en enero, abriremos otro, conducido por Mariana Sández de lectura de cuentos. Sergio Waisman acaba de dictar un taller intensivo sobre Borges, que pivoteó sobre la lectura y análisis de cuentos de dos libros del autor argentino: Ficciones y El Aleph.
¿Cuáles son los títulos más vendidos en Olavide | Bar de Libros
Cambian: no es lo mismo un libro para las vacaciones (la novela negra es un hit en la playa) que para una época de crisis (el relato de la suya que Emmanuel Carrère hace en Yoga, es muy recomendable, por ejemplo). Olavide | Bar de Libros es una librería generalista con énfasis en la ficción, el ensayo y la poesía. Pero también tenemos títulos muy elegidos de literatura para chicos, deportes, novela gráfica, biografías, filosofía, fotografía y una selección de clásicos de bolsillo en castellano y en inglés. Y si no tenemos el libro que buscas (el espacio es limitado), siempre ofrecemos encargarlo si es posible conseguirlo. Te diría que en general prima el interés por la narrativa contemporánea: en los cinco meses que llevamos abiertos se han vendido muy bien las novelas Hamnet, de Maggie O’Farrell; Una casa llena de gente, de Mariana Sández y Las inseparables, de Simone de Beauvoir, por mencionarte solo tres. Agua y jabón, un ensayo sobre la elegancia involuntaria, de Marta D. Riezu también fue un éxito de este año.
«Hay libros para distintos tipos de lectores y de que todos y cada uno de nosotros podemos encontrar un libro que nos esté dedicado y enriquezca nuestras vidas.»
¿Por qué tipo de literatura se decantan más vuestros clientes?
Son lectores muy inquietos y hasta sofisticados pero con intereses muy variados. Hay lectores consecuentes de poesía (Peri Rossi, Vallejo, García Montero, Lorca, William Carlos Williams, Pizarnik, Leonard Cohen, Luna Miguel, entre otros autores). Otros buscan clásicos (hemos vendido desde los Diálogos de Platón y los Ensayos de Montaigne hasta El conde de Montecristo y En busca del tiempo perdido ). La novela gráfica tiene muchos lectores y hay, por supuesto, hechos de actualidad que suscitan interés: el atentado contra Salman Rushdie volvió a poner sus libros en los escaparates; el Nobel a Annie Ernaux hizo que la gente empezara a pedir sus títulos; la muerte de Javier Marías multiplicó el interés por sus novelas, cuentos y ensayos.
¿Alguna anécdota que ya forme parte de la historia de esta librería?
Llevábamos poco tiempo de rodaje y una tarde de verano entró a Olavide un joven de unos 20 años que quería saber el precio de la biografía de Maradona que teníamos en el escaparate (Maradona, el pibe, el rebelde, el dios, de Guillem Balagué). Es un libro de tapa dura, con fotos, caro. Preguntó tímidamente y se fue. Al rato volvió juntando billetes y monedas. Nos conmovió porque se veía que no frecuentaba habitualmente librerías: estaba buscando un regalo para su hermano. Le hicimos 5% de descuento, que es el máximo que se puede hacer en libros y todavía no le alcanzaba, así que completamos nosotros el euro y pico que faltaba. «Hoy hicieron feliz a un chico», agradeció. Es un recuerdo conmovedor que sintetiza para nosotros la idea de que hay libros para distintos tipos de lectores y de que todos y cada uno de nosotros podemos encontrar un libro que nos esté dedicado y enriquezca nuestras vidas.