
¿Cómo será la nueva Fiesta del Libro de París?

Tras dos años de ausencia, el antiguo Livre Paris se ha renovado para convertirse en el Festival del Libro de París.
Livres Hebdo desvela los principales cambios de este evento, que tendrá lugar a un paso de la Torre Eiffel.
El Salón del Libro de París, que se ha convertido en Livre Paris, experimenta una nueva transformación al llamarse Festival del Libro de París. Pero, ¿qué cambios supone esto? Livres Hebdo desvela siete puntos esenciales de esta nueva fórmula que pondrá las letras indias en el punto de mira y cuyos festejos comenzarán el 21 de abril y se prolongarán hasta el 24. En pleno fin de semana electoral, al comienzo de las vacaciones de primavera.
De la feria al festival
«No estamos aquí para vender metros cuadrados de moqueta, sino para promocionar libros. En cuanto hacemos una elección, se arbitra con este indicador», afirma Jean-Baptiste Passé, nuevo director general del festival. Tras una larga auditoría dirigida por Bertrand Morisset, el equipo de la nueva edición tomó una decisión radical: transformar Livre Paris en un festival en París. Con este gran cambio, el director espera «reactivar el resorte del deseo» para que este evento de cuarenta años «vuelva a dar ganas a la gente».
El«salón»
40 años después de la primera edición del Salón del Libro de París, y tras dos anulaciones sucesivas en 2020 y 2021 debido a la crisis sanitaria, un nuevo festival verá la luz del 21 al 24 de abril de 2022, fruto de una amplia consulta entre los editores de libros.
De 1981 a 1988 y de 1990 a 1993, el espectáculo se celebró en el Grand Palais. En 1989 y después de 1994, se trasladó a Porte de Versailles. Ahora se vuelve a los orígenes, o casi. El acto se ha trasladado a los pies de la Torre Eiffel, en el Grand Palais Éphémère, al otro extremo del Campo de Marte. El espacio reducido y la particular configuración del lugar, en cruz, inspiraron a los organizadores. A diferencia de las últimas 40 ediciones, los stands no estarán «ordenados» según las casas, sino según tres temas. Un ala central «contar el mundo», dedicada a las ciencias humanas y la literatura, un ala lateral «imaginar el mundo» en torno al cómic, los mangas y los libros infantiles y, finalmente, una última ala «vivir el mundo» dedicada al ocio creativo, las bellas artes, la gastronomía y el turismo. «Estos tres temas permitirán un paseo más coherente», asegura Marie-Madeleine Rigopoulos, nueva directora artística del festival.
¿Y los editores?
Al alejarse de esta lógica de stands y «barnums», el festival desea tener un enfoque más «museístico que de evento», afirma Jean-Baptiste Passé. Así, se invita a los editores que publican diferentes tipos de literatura a participar en el juego dividiendo su stand único en varios lugares, según el tema. Esto último puede hacerse de tres maneras diferentes: en forma de un espacio llamado «salón», un bloque llamado «quiosco» o, más modestamente, gracias a las «islas», disponibles en dos tamaños.
Nuevo modelo económico
Para compensar la ausencia de organizadores externos, ya que no se ha renovado el contrato con Reed Expo, el Sindicato Nacional de la Edición (SNE) ha creado una filial de eventos de su propiedad. Esto le ha permitido ratificar importantes cambios en la gestión económica del evento. A partir de ahora, la entrada al festival será gratuita para todos. Los visitantes solo tendrán que inscribirse con antelación o acudir durante las franjas horarias en las que el aforo no esté completo. La filial de eventos de la SNE también ha decidido encargarse de la gestión bibliográfica del evento. En asociación con los libreros de la asociación Paris Librairies, la filial comprará libros a los distribuidores y determinará el número de títulos en función de los espacios alquilados. «Queremos armonizar la forma de vender los libros, sobre todo en beneficio de los visitantes, que sólo tendrán que hacer un pago», explica Jean-Baptiste Passé. Una caja centralizada como en una librería… Richard Dubois, antiguo librero con experiencia en el evento, coordinará las compras y la logística con los editores expositores como director de operaciones.