
Canarias tiene, por fin, una Ley de Bibliotecas

Biblioteca Municipal de Tres Palmas | © Chano001 / Wikimedia commonsEl Parlamento de Canarias aprobó el pasado miércoles 13, por unanimidad y en un ambiente casi festivo, la primera ley isleña de Lectura y Bibliotecas. Tras 42 años de democracia, las Canarias dejan de ser la única región sin una norma bibliotecaria. Una normativa que reviste gran importancia en una comunidad con malos datos de lectura y en rendimiento escolar según los informes Pisa. La aprobación de la ley contó con la presencia de numeroso personal de estos bibliotecas, sobre todo bibliotecarias, del presidente de la Academia Canaria de la Lengua, Humberto Hernández, y de otras personalidades. Entre las medidas más significativas que tiene esta Ley de Bibliotecas de Canarias se encuentra la obligación de que todos los municipios, sin atender a su número de habitantes, tengan al menos una biblioteca que respete los parámetros mínimos contemplados por esta nueva normativa. Esta ley atiende a una de las principales demandas del sector, como es la exigencia de la titulación adecuada para los profesionales y auxiliares que trabajen en las distintas bibliotecas de las islas. Implica, asimismo, el nacimiento de la ‘Biblioteca de Canarias’, como «centro superior, funcional y técnico del sistema». Esta Biblioteca se define como la «cabecera de la red de bibliotecas públicas» y se concibe como «el conjunto de servicios técnicos descentralizados, responsable de recoger, inventariar, catalogar, conservar y difundir la producción bibliográfica y cultural» de las islas y el que a nivel estatal o internacional esté vinculado con el archipiélago. Para proporcionar información sobre las bibliotecas y centros de documentación se crea un Directorio de bibliotecas de Canarias. Para formar parte de la Red de Bibliotecas Públicas de Canarias, los centros deben abrir al público 15 horas semanales, repartidas hasta en seis días. El Gobierno de Canarias está obligado por esta Ley a destinar al menos un millón de euros este año para la puesta en marcha de la misma.