
Amazon bloquea el préstamo digital de sus libros en bibliotecas

El préstamo de libros electrónicos mediante las bibliotecas públicas ha sido un dolor de cabeza desde la llegada de la lectura digital. Los requisitos de las editoriales y los obstáculos tecnológicos que deben superar las bibliotecas y los usuarios han hecho que el camino sea tortuoso, pero resulta que algunas de las barreras tienen poco de arbitrarias.
Amazon, la empresa que normalmente no va creando amigos en el sector editorial ha sido ahora objeto de un informe que documenta el trato que tiene con las bibliotecas y sus usuarios. La compañía ha reconocido al Washington Post que no permite que los libros electrónicos de ninguno de sus títulos de Amazon Publishing sean distribuidos por las bibliotecas o prestados por los usuarios.
¿Por qué? Para obligarte a comprar el libro. Con el aumento del interés por el préstamo digital debido a la pandemia y la mayor necesidad de pedir prestado en lugar de comprar debido a la pérdida de empleo y la depresión económica, cada vez más usuarios recurren a los libros electrónicos por seguridad y asequibilidad.
Llevamos suficiente tiempo conviviendo con el libro electrónico como para que las editoriales encuentren un método rentable a través del cual se pueda prestar un libro electrónico de forma que ayude a las bibliotecas a cumplir con su misión, apoye a los autores y siga aportando dinero a sus arcas. Sin embargo, escudarse en que la decisión de no permitir el préstamo de los libros editados por Amazon Publishing es para salvaguardar los derechos de sus autores resulta, cuanto menos, controvertido, más aún viendo como en España algunas autonomías ya están remunerando a los autores por el préstamo de sus obras en bibliotecas públicas.